La carrera Divina Pastora de Madrid del pasado domingo 28 de Octubre ha sido la cuarta y última prueba del II Circuito Divina Pastora, que ha tenido lugar a lo largo de los últimos 12 meses en Valencia, Sevilla, Oviedo, Palma de Mallorca y finalmente en Madrid.
Después de casi 3 semanas sin un entrenamiento específico de carreras, pero habiendo recorrido largas distancias a pie durante los últimos 15 días por el Camino de Santiago del Norte, me presenté en la linea de salida sin un claro objetivo, y sin saber en qué condiciones me iba a encontrar a lo largo de la prueba. Se trataba de un reencuentro con las carreras teniendo en el objetivo la Behovia-San Sebastián del próximo 11 de Noviembre.
El recorrido partía y terminaba en el Paseo de Coches del Parque del Retiro de Madrid, y discurría por un circuito bastante conocido entre los corredores de carreras populares madrileñas, parte del mismo por la Castellana, y luego rodeando por el exterior todo el Parque del Retiro, para entrar en él por Alfonso XII y la temida Cuesta del Ángel Caído, volviendo así al punto de partida tras 10 Kms de carrera.
Cerca de 4000 corredores se acercaron al Parque del Retiro para tomar la salida, poniendo una pincelada multicolor y divertida a una fresca mañana de otoño. A las 9 de la mañana todo estaba preparado para empezar la carrera, los principales favoritos dispuestos en la linea de salida para comenzar a correr y el resto de participantes agolpados tras ellos.
Como no sabía en qué forma me encontraba después de casi tres semanas de caminatas diarias, y recordando el fiasco que supuso la primera carrera del año pasado tras estar en el Camino de Santiago, comencé a correr de forma conservadora, intentando escuchar las señales del cuerpo y descubrir las condiciones del mismo. Y fue todo un acierto...
El primer kilómetro, subiendo por el Paseo de Coches rodeado de muchos otros corredores, pasó en 4:43 minutos. Como dice mi amiga Miri, un kilómetro inicial a ritmo suave es muy conveniente, porque te permite calentar los músculos y tomar contacto con la carrera de forma paulatina.
Y ahí está, la Puerta de Alcalá, nada mas pasar bajo el paso inferior de Velazquez. Había comenzado el segundo kilómetro y tocaba bajar hasta Cibeles para completar el segundo kilómetro en 4:20 minutos antes de comenzar a subir por la Avenida de la Castellana, que como comenta La Pingüina Veloz, de "llana" tiene poco. Tercer kilómetro en 4:30, donde me cruzo con los corredores que lideraban la carrera. Aplausos para ellos, así como para Marta Domínguez, la primera mujer en cabeza.
El cuarto kilómetro, de vuelta Castellana abajo, lo hice reservando un poco, a la espera de la vuelta hacia el Retiro, y pasó en 4:26. De vuelta en Cibeles comienza la subida hasta la Puerta de Alcalá, que marcó el paso por el quinto Km, que esta vez lo alcancé en 4:31. Continúa la cuesta por la calle Alcalá hasta llegar a Menéndez Pelayo, donde acaba la ascensión, y me siento con fuerzas para incrementar el ritmo tras pasar el kilómetro 6 en 4:39.
El séptimo y octavo kilómetros discurrían en descenso alrededor del Parque del Retiro, y con la mente puesta en la Cuesta del Angel Caído, comencé a aumentar la velocidad, pasando el km 7 en 4:07, y el octavo en 4:06, justo antes de girar hacia Alfonso XII y con ello enfrentarme al noveno Km, el más duro de toda la carrera. Y cuál fue mi sorpresa cuando, al empezar a subir, me sentía ágil, fresco y con una energía especial que me permitió subir a buen ritmo, adelantando a muchos corredores que, unos jadeantes y otros exhaustos, luchaban por llegar hasta la estatua del Ángel Caído, el mismo Diablo en persona, al final de la cuesta, que yo completé en 4:43 minutos.
Ya sólo quedaba correr todo lo que pudiera, en un frenético sprint hasta la meta, para cruzarla con los brazos en alto y una sonrisa por la satisfacción de llegar por debajo de 45 minutos en una carrera, en principio, conservadora. O la sonrisa sería porque me la habían contagiado...? Nunca lo sabré.
Los ganadores de la prueba en ambas categorías, David Solís y Marta Domínguez, cruzaron la meta en 30:16 y 35:36, respectivamente.
Aquí está la clasificación final, en la que registré un tiempo de 44:17 minutos, el 28 de mi categoría, una buena marca con vista a los 20 Kms de la próxima Behovia-San Sebastián.
Enhorabuena a los ganadores de la prueba, tanto en la categoría masculina como en la femenina, así como a todos aquellos seguidores que, a pesar de la hora de la carrera, madrugaron como auténticos campeones para felicitar a los corredores una vez cruzada la linea de meta.
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