La invasión de los "drones"

     A los que nos hubiera gustado nacer con las facultades de las aves y así poder surcar los aires de forma autónoma, siempre nos atraen todas aquellas cosas relacionadas con VOLAR. Y conectado con este tema y por diversos motivos, en los últimos días me he visto envuelto en conversaciones relacionadas con los "drones".

     Podríamos hablar de "El ataque de los drones", en analogía con el Episodio II de la famosa doble trilogía de George Lucas, La Guerra de las Galaxias: El ataque de los clones. Pero, en realidad, ¿qué es un drone?

     Los drones son vehículos voladores no tripulados, que son operados desde tierra por seres humanos a fin de cumplir determinadas funciones. Los aviones no tripulados son conocidos en el entorno militar desde hace muchos lustros, pero en los últimos años han aparecido también en el ámbito civil, con fines muy variados, desde su utilización para la revisión de tendidos eléctricos de forma más segura que con personal humano, en funciones de emergencia sobre áreas peligrosas como incendios o nubes tóxicas, ayudando a equipos de emergencia como bomberos con el fin de evitar posibles riesgos en las personas, o como la última noticia emitida por Amazón, quien planea utilizar los drones como servicio de paquetería para entrega de los pedidos a domicilio.

     Una nueva tecnología que ha aparecido en el mercado a precios relativamente asequibles y que, como todo lo nuevo, viene envuelta en la polémica en relación con su seguridad, su regulación y sus permisos. Pero yo no voy a entrar a discutir esos aspectos.

Sentimientos encontrados: el yin y el yang

     El yin (陰) y el yang (陽) son dos conceptos del taoísmo que exponen la dualidad de todo lo existente en el universo. Describe las dos fuerzas fundamentales opuestas y complementarias, que se encuentran en todas las cosas.

     Gráficamente, el concepto se suele representar mediante un símbolo denominado taijitu, "diagrama del taiji", que en su forma actual más conocida, la parte oscura, normalmente negra, representa el yin, el principio femenino, la tierra, la oscuridad, la pasividad y la absorción, mientras que la parte clara, normalmente blanca, representa el yang, el principio masculino, el cielo, la luz, la actividad y la penetración.

     Y así me encuentro yo, envuelto en el yin y el yang en todo lo que me rodea tras superar la lesión del esguince. Por una parte alegre por haberme recuperado rápido y poder haber empezado a entrenar de nuevo. Por el otro, inquieto por la incertidumbre de que una recuperación tan rápida pueda propiciar una recaída no deseada.